Con frecuencia se hace la pregunta, incluso por cristianos sinceros, si es o no correcto para Dios actuar para Su propia gloria. Para responder a esta pregunta, solo necesitamos considerar quién es Dios. De acuerdo con las Escrituras, Él es infinitamente más grande que toda la creación combinada. Por lo tanto, no solo es correcto, sino también necesario para Él el tomar el más alto lugar y hacer de Su gloria la gran razón o el fin principal de todo lo que Él hace. Es Su derecho tomar el centro y obrar todas las cosas de manera que Su gloria [i.e. la plenitud de lo que Él es] pueda darse a conocer a todos, con el fin de que pueda ser glorificado [i.e. estimado y adorado] sobre todo. Que Él rehúya tal preeminencia sería como negar que Él es Dios. Para cualquier otro que no sea Dios buscar tal preeminencia sería la forma más grosera de idolatría. Thomas Boston escribe, “Todo agente racional se propone a sí mismo un fin a su obra, y el más perfecto, el fin más elevado. Ahora Dios es el Ser más perfecto, y Su gloria el fin más noble.” (Works, Vol.1, p.11) A.A Hodge escribe, “Puesto que Dios mismo es infinitamente más digno que la suma de todas las criaturas, por consiguiente la manifestación de Su propia excelencia es… el más alto y el más digno fin concebible.” (Outlines of Theology, p.245) Charles Spurgeon escribe, “Dios debe tener el más alto motivo, y no puede haber otro motivo concebible más alto que Su propia gloria… Él considera cuidadosamente el bien de Sus criaturas; pero incluso el bien de Sus criaturas es solo el medio para el fin principal, la promoción de Su gloria. Entonces todas las cosas son para Su beneplácito, y para Su gloria trabajan diariamente.” (El Púlpito del Tabernáculo Metropolitano, Vol.10, p.304) Un extracto de la carta de Robert Haldane dirigida en 1824 al Sr. Cheneviere, el conocido profesor de Divinidad en Ginebra, “No hay nada que se haya traído a la consideración de los estudiantes de divinidad que me escucharon en Ginebra, lo cual parecía contribuir tan eficazmente al colapso de su sistema de religión falso, fundamentado en filosofía y vano engaño, como la sublime visión de la majestad de Dios presentada en los cuatro últimos versos de esta parte de la Epístola (i.e. Romanos 11:33-36). De Él, y por Él, y para Él, son todas las cosas. Aquí Dios es descrito como Su propio fin en todo lo que hace. Juzgando a Dios como si fuera uno de ellos, ellos [i.e. los estudiantes] estuvieron sorprendidos al principio con la idea de que Él debe amarse a Sí mismo suprema e infinitamente más que todo el universo, y consecuentemente debe preferir Su propia gloria en vez de todo lo demás. Pero cuando les fue recordado que Dios en realidad es infinitamente más afable y más valioso que toda la creación, y que consecuentemente, si Él ve las cosas como realmente son, Él debe considerarse a Sí mismo como infinitamente más digno de ser valorado y amado, ellos vieron que esta verdad no tenía controversia. Su atención al mismo tiempo estaba dirigida a numerosos pasajes de las Escrituras, las cuales afirman que la manifestación de la gloria de Dios es el gran fin de la creación de que Él tenga a Sí mismo en mente en todas Sus obras y dispensaciones, y ese es un propósito en el cual Él demanda que todas las criaturas inteligentes deban aceptar, y buscar, y promover como su primera y primordial tarea. Pasajes que demuestran esto, tanto en el Antiguo como en el Nuevo testamento, exceden con creces en número a lo que es consciente alguien que no ha examinado el tema. Autor: Paul WasherPaul David Washer ministró como misionero en Perú 10 años, tiempo durante el cual fundó la Sociedad Misionera HeartCry para apoyar plantadores de iglesias peruanos. Paul ahora sirve como director de misiones de HeartCry (heartcrymissionary.com), la cual Dios ha bendecido para poder apoyar a misioneros en más de cuarenta naciones al rededor del globo. Él y su esposa Charo tienen cuatro hijos: Ian, Evan, Rowan, y Bronwyn. Para más información acerca de Paul Washer o el ministerio Heartcry, haga clic aquí. Categoría: ¿Quien es Dios?
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Iglesia Salvos Por Gracia de Vancouver, Washington Fundada: Noviembre 5, 2017 Constitución de la Iglesia Preámbulo: Nosotros, los miembros de la Iglesia Salvos Por Gracia, nos sometemos voluntariamente a los siguientes artículos para el orden y el bienestar espiritual de esta iglesia. Artículo I: Nombre El nombre de esta iglesia es Iglesia Salvos Por Gracia. Escogimos este nombre porque enfatiza nuestro mensaje principal: el Evangelio de la gracia (Efesios 2:8-9). El nombre de esta iglesia solo puede cambiarse por voto mayoritario en una reunión de miembros programada regularmente. Artículo II: Asociación de la Iglesia Iglesia Salvos Por Gracia funcionará como una iglesia autónoma, siendo gobernada por la palabra de Dios (2 Timoteo 3:15-17), bajo el Señorio de nuestro Señor Jesucristo (Efesios 1:22), aparte de cualquier supervisión o autoridad eclesiástica exterior. Cualquier asociación que formemos con otras iglesia de fe y de práctica similares siempre debe ser voluntaria, para edificación mutua, y nunca en contradicción con nuestra doctrina (Judas 3). Artículo III: Fundamento, Propósito, y Prioridades de Ministerio a) El fundamento de esta iglesia es, y siempre será, el Señor Jesús (1 Corintios 3:11). La única regla infalible e autoridad suprema para la doctrina y práctica de esta iglesia siempre será la Biblia (Salmos 119:89). b) El propósito de esta iglesia es glorificar a Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo (1 Corintios 10:31). Sobre todo, deseamos que el nombre de nuestro Padre celestial sea santificado en nuestras vidas y en este mundo (Mateo 6:9). Por lo tanto, esta iglesia se reunirá regularmente para cultos de adoración, actividades e ministerios evangelísticas públicas, una reunión de negocios semestral, y otros proyectos de servicio comunitario, etc. c) Las prioridades del ministerio de esta iglesia fluyen de la revelación de la gloria de Dios dada por medio de la persona, la obra, y la palabra de Cristo (2 Corintios 4:6). Existimos para adorarle a Dios en espíritu y en verdad (Juan 4:23). Nuestras prioridades ministeriales son predicar, enseñar, estudiar, cantar, obedecer, y orar según todo el consejo de Dios (2 Timoteo 4:1-4; Hechos 20:26-28). Primero Dios, nos reuniremos semanalmente para cultos de adoración, los cuales se centrarán en la predicación de la palabra de Dios, la oración, la convivencia, y las ordenanzas del bautismo y la cena del Señor (Hechos 2:42). Además, nos enfoquemos en amar los unos a los otros como familia de Dios, y en el avance de la gran comisión de nuestro Señor por medio del evangelismo y obras de misericordia (Mateo 5:16; 28:18-20; 1 Pedro 2:9; 3:15). Artículo IV: Declaración De Fe Nuestra iglesia ha definida nuestra doctrina en un documento llamado, “La Declaración De Fe De Iglesia Salvos Por Gracia”. Aceptamos este documento como un resumen de nuestras creencias bíblicas con respecto a las doctrinas más esenciales para la salud de la iglesia. Esta declaración de fe no es nuestra autoridad más grande, ni es una regla infalible. Sin embargo, es un resumen de nuestra doctrina, lo cual fluye de nuestro estándar supremo, lo cual es la Biblia. Artículo V: El Gobierno de la Iglesia El gobierno de Iglesia Salvos Por Gracia consistirá de la supervisión y el liderazgo de pastores (quienes en la Biblia también son llamados por los títulos anciano y obispo). Nuestra meta es tener una pluralidad de pastores (Hechos 14:23), dotados por Dios (1 Timoteo 3:2), y confirmados por otros pastores. Los pastores tendrán la supervisión y el liderazgo de esta iglesia (Hebreos 13:17). Aunque es cierto que solo los pastores tienen la autoridad de gobernar en la iglesia (1 Timoteo 5:17), sin embargo ellos deben ser los más grandes siervos en la iglesia, imitando el ejemplo de Cristo (Marcos 10:42-45). Por lo tanto, los pastores no deben reinar como si fueran reyes, sino pastorear con amor y humildad. Debido a la responsabilidad dada a los pastores, la autoridad final para todos los asuntos de la doctrina de la iglesia, la práctica y la disciplina de la iglesia, recaerá sobre ellos, mientras ellos deben someterse completamente a la autoridad de Cristo y de Su palabra. Entonces los pastores no tienen el derecho de exceder los límites de la Sagrada Escritura. Bajo la autoridad de los pastores también hay otro tipo de líder dentro de la iglesia, lo cual es el oficio del diácono. Los diáconos tienen la supervisión de las necesidades físicas e materiales dentro de la iglesia. Ninguna persona en esta iglesia puede ser, o puede seguir siendo, ni un pastor ni un diácono que no afirma ni se somete a nuestra declaración de fe y a esta constitución. Artículo VI: La Membresía de la Iglesia Cualquier persona que profesa y que demuestra arrepentimiento hacia Dios y fe en la persona y la obra de Jesúcristo (Hechos 20:21); que ha sido bautizado bíblicamente (Mateo 28:19); que afirma nuestra declaración de fe junto con esta constitución (Judás 3); que está dispuesta a someterse al gobierno de esta iglesia (Hebreos 13:17); que no está viviendo en pecado abierto (1 Corintios 5:9-13)- lo cual incluye dejar a otra iglesia de una manera pecaminosa y no mostrar evidencias de arrepentimiento; y que quiere comprometerse con esta iglesia, será bien recibida en esta iglesia. a) Recepción en la Membresía: Cualquier persona que desea ser miembro de esta iglesia debe reunirse con los pastores para discutir su testimonio personal de salvación, junto con los requisitos y expectativas para la membresía de la iglesia. Entre los otros requisitos para ser miembro de esta iglesia, nadie que práctica cualquier pecado mencionado en 1 Corintios 6:9-10, Efesios 5:3-5, o Apocalipsis 21:8 puede ser miembro de esta iglesia hasta que se arrepiente. Despues de todo esto, si es que ningún objeción legítimo ha sido presentado a los pastores, la persona será admitida a esta iglesia inmediatamente (Hechos 2:41). b) Cancelación de Membresía: La membresía de alguien puede ser cancelada debido a cualquiera de los siguientes razones: muerte física; la transferencia de membresía a otra iglesia; cancelación voluntaria del miembro; o la excomunión de un miembro. Un miembro será excomulgado si niega de manera arrepentida la declaración de fe de nuestra iglesia o cualquiera de los requisitos para la membresía de la iglesia enumerados anteriormente en Articulo VI, a) Recepción en la Membresía. Todas las cancelaciones de membresía deben ser hechas por los ancianos y deben ser anunciadas a la iglesia en la reunión de adoración programada lo más pronto posible. Artículo VII: Los Oficiales de la Iglesia a) Pastores 1) Calificaciones: Las calificaciones de un hombre que desea tomar el oficio de pastor están expresadas claramente en la Biblia (1 Timoteo 3:1-7; Tito 1:5-9; etc.). Cualquier hombre llamado a este oficio tiene que afirmar y someterse a la declaración de fe de esta iglesia y a esta constitución. 2) Responsabilidades: Todos los pastores son pastores del rebaño de Dios (Hechos 20:28), y por lo tanto ellos darán cuenta a Dios para sus ministerio (Hebreos 13:17). Falsos maestros y pastores negligentes recibirán un juicio muy, muy severo en el día del juicio de Dios (Santiago 3:1; Zacarías 10:3; Mateo 7:15-23); y, por lo tanto, el nombramiento de un hombre para este oficio nunca se debe ser ligeramente (1 Timoteo 5:22). Los pastores son responsables ante Dios para la supervisión, el cuidado espiritual, el alimento espiritual, y el pastoreado, del Su rebaño (1 Pedro 5:1-5; Hechos 20:26-28). Aunque todos los pastores tienen que ser aptos para enseñar la palabra de Dios (1 Timoteo 3:2), algunos de ellos serán mas involucrados en, y quizás mas dotados para, la enseñanza pública de la palabra (1 Timoteo 5:17-18). 3. Selección: El proceso normal para la selección de pastores es el proceso de reconocimiento (1 Timoteo 3:1-13). Un hombre que la iglesia está considerando para este oficio tiene que tener un pasión ardiente por este trabajo ministerial específico (1 Timoteo 3:1). El trabajo de nombrar nuevos pastores le pertenece a pastores (Hechos 14:23). La iglesia puede participar junto con los pastores en ciertos aspectos del proceso, pero la votación final es el deber de pastores. 4. Ordenación: El hombre que ha sido seleccionado al oficio de pastor será nombrado y ordenado oficialmente ante Dios y ante toda la iglesia durante un culto corporativo de adoración. Los pastores de otras iglesia de sana doctrina pueden ser invitados para participar. La iglesia entera debe orar y ayunar por esta ordenación por lo menos un día algún tiempo antes del servicio. Durante el servicio los pastores deben poner manos sobre el nuevo pastor y orar fervientemente por él (Hechos 13:3; 14:23; 1 Timoteo 4:14; 2 Timoteo 1:6). b) Diáconos 1) Calificaciones: Los diáconos tienen que cumplir con los requisitos bíblicos dados para este oficio (1 Timoteo 3:8-13), y deben afirmar y someterse a nuestra declaración de fe y a esta constitución. 2) Responsabilidades: Los diáconos se encargarán por la administración de las necesidades físicas de la iglesia (1 Timoteo 3:8). Aunque servir en ministerios de misericordia a los demás en la iglesia es la responsabilidad de todos, especialmente es el ministerio y la responsabilidad de los diáconos (Hechos 6:2-3). Será la responsabilidad de los diáconos supervisar el cuidado de los pobres en la iglesia, el mantenimiento de la propiedad de la iglesia y la preparación para los cultos de la iglesia, y también el presupuesto financiero de la iglesia, etc. Ellos deben supervisar los informes financieros anuales y cualquier otro informe de negocios y recibos necesarios. Los saldos de cuentas, ingresos y gastos serán monitoreados y mantenidos por los diáconos y compilados en un informe financiero anual que se presentará a la iglesia en un reunión de negocios anual. Todo de esto será hecho bajo la supervisión de los pastores. 3) Selección: El proceso normal para la selección de los diáconos es el proceso de reconocimiento (Hechos 6:1-7; 1 Timoteo 3:8-13). Los diáconos, tanto como los pastores, tienen que cumplir con los requisitos bíblicos dados para este oficio, y deben afirmar y someterse a nuestra declaración de fe y a esta constitución. Hechos 6:3 nos muestra que los pastores (que, en ese momento, eran también los apóstoles) decidieron el número total de diáconos necesarios, y que la iglesia entera seleccionó de entre si misma los que ellos sabían que eran calificados para ese ministerio. Por lo tanto, nuestra práctica sería igual. Todos los miembros seleccionarán alguien que ya ha sido probado como un siervo fiel en la iglesia (1 Timoteo 3:10) por medio de votar, y aquellos que reciben más votos, si son aprobados por los pastores, serán nombrados a este oficio del diácono. Dado que todo debe hacerse bajo el liderazgo de los pastores, ellos siempre tendrán la última palabra en el nombramiento y la terminación de los diáconos. 4) Ordenación: Durante un culto corporativo de adoración los pastores nombrarán y ordenarán a las personas designadas al oficio del diácono. Los pastores de otras iglesias de sana doctrina pueden ser invitados a participar. Los pastores deben poner manos sobre los nuevos diáconos y orar por ellos (Hechos 6:6). VIII: La Propiedad y Los Bienes de la Iglesia Si llega el tiempo cuando es necesario descontinuar esta iglesia, los miembros existentes que siguen fieles a la declaración de fe de esta iglesia y a esta constitución, después de una temporada de oración y ayuno, tendrán la libertad de decidir por un voto mayoritario (más que 50%) como y a quien serían transferidos todos de los bienes de esta iglesia, siempre y cuando que sean transferidos a una iglesia, o a una organización misionera, de fe y de práctica similares y que activamente está cumpliendo la gran comisión (Mateo 28:18-20). IX: Enmiendas A Esta Constitución Cualquier enmienda o modificación a esta constitución solo puede hacerse por voto mayoritario del pastor/pastores de esta iglesia. Antes de hacerlo, deben notificar a la iglesia y darles tiempo para orar y comunicar a los pastores las dudas o desacuerdos que tengan. Si después de considerar cualquier objeción, los pastores continúan con el cambio, entonces deben anunciarlo a la congregación durante el próximo servicio de adoración. Autor: Tomás KarrerCategoría: Documentos oficiales y documentos de posición de la Iglesia Salvos Por Gracia |
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